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FAMILIA DE VANCINI Y ANTONIA SU MUJER Personajes
Todas las escenas transcurren en el taller de una bicicletería La acción se desarrolla en el taller de una bicicletería. Se lo ve gris, sucio. En desorden se encuentran partes de bicicletas, ruedas de distintos tamaños y herramientas mal acomodadas están sobre una mesa de trabajo. También se puede ver en un primer plano un modulo de practica. En la pared del fondo están colgados algunos cuadros. Una escalera que sube marca la única salida al exterior. Por lateral derecho entra Vancini, lleva overol azul y camisa de un tono más claro, ambas prendas sucias de grasa. Se lo ve fuerte aunque gastado. Da una ojeada al taller, mira una bici colgada en la pared, la acaricia y le enciende una luz como si fuera una pintura. Luego se dirige a la mesa de herramientas, toma algunas y se pone a trabajar desarmando una bicicleta visiblemente usada. VANCINI : Esta es de la de antes, dura, pesada. No sé si me va a servir alguna parte. Ahora vienen livianas, ágiles, una pluma, pero agarrás un pozo y se desarman. En una de esas debería probar con un cuadro más fuerte, y que el pibe se reviente pedaleando. Con una buena preparación física todo se soluciona. ¡Tiene que practicar...! ¡Y mucho ! (Ríe a carcajadas) Se escuchan risas. Son Titi y el Aguila que entran jugando al taller. Titi usa ropa de ciclista y el Aguila overol y camisa sucios. TITI : ¡No seas bruto che ! ¡Casi me reventás la espalda ! AGUILA : Es parte de la práctica, imaginate si te caes, no te vas a poner a llorar como una mariquita, te levantás y seguís pedaleando. TITI : Si pero ahora no me caí, y me duele la espalda. Haceme fricciones, Aguila. AGUILA : ¡Está bien ! Dale antes de que venga el viejo. (Lo masajea). Ya está. ¡Seguro quedaste como nuevo ! Ahora subite a la bici y practicá. (Le da una palmada en las nalgas) ¡Che, Titi ! Estás un poco culón vos. TITI : (Con vergüenza) ¡Andá, no jodás ! (Se sube a la bici y comienza a pedalear) Vancini esta sentado en la mesa de trabajo. Antonia le ceba mate y Beta, en el otro lateral se queja de dolores de parto. VANCINI : (A Beta) ¡Ma, dejate de quejar! Hace tres años que venís quejándote, y nunca nada, ni un pedo te tiraste. BETA : ¡Escuche, mamá lo que dice, voy a tener un hijo y el me trata así ! (Se contorsiona elevando una gran panza) ANTONIA : (Con una soguita trata de ahorcar a Vancini, este la rechaza con una mano y le alcanza el mate que acaba de tomar con la otra) VANCINI : (A Beta) ¡Que vas a tener un hijo vos ! ¡Son excusas para no hacer nada ! ¡Gases, eso es lo que tenés ! ¡Gases ! (Antonia sale con el mate. Beta llora. Entra Manguera, lleva una bici en el hombro) MANGUERA : ¡Que lo parió ! ¡Ya no hay respeto en la juventú ! Mire, Vancini, mire como me puso las piernas de las patadas que me dió ! Y eso que era un pendejo de doce o catorce años. ¡Que falta de respeto ! Me cagó a patadas. ¡Todo por esta puta bicicleta ! Ya estoy grande para esto, Vancini. VANCINI : ¿Pero qué te pasa ? ¿Por unas pataditas te vas a achicar ? Escuchame, ¿qué mejor trabajo que éste. Con una bici por día que me traigas, ya está. ¿Dónde vas a conseguir un laburo así ? MANGUERA : Si , claro. Pero a mi me da lástima de los pibes, sobre todo ahora que voy a tener un hijo. (Abraza a Beta) BETA : ¡Ay ! ¡Ay !. ¡Se me dilata, se me contrae, se me cae, se me cae! ANTONIA : (Entra corriendo con un mate en una mano y un cuchillo en la otra. Ataca a Vancini, quién la rechaza sin darle mayor importancia) MANGUERA : (Largando a Beta) ¡Y todo para armar esa puta bici ! VANCINI : (Tomando a Antonia por el brazo que tiene el cuchillo) ¡La puta bici que ganará el campeonato ! En el taller Aguila y Titi sentados en una banqueta. AGUILA : ¡No, nada de sánguche! Ahora tomás un jugo de naranja, y después de la práctica un yogur. TITI : ¡Ufa ! ¡Tengo hambre! AGUILA : ¡Nada dije ! Tómese el jugo y a practicar...¡Vamos ! TITI : ¡Ta bien ! (Toma el jugo) ¡Qué carajo ! AGUILA : No diga malas palabras, que un buen deportista habla bien, no dice carajo como dice Ud...., y tomá el jugo que se hace tarde. TITI : Tomá. (Le devuelve el vaso vacío) Vos te parecés cada día más a mi papá, rezongás y me tratás de usted. (Entra Antonia con un mate en la mano y un martillo en la otra, amenazante busca por el taller y luego sale) AGUILA : Parece que hoy el viejo se quedó dormido. Empezá a pedalear que te voy a tomar el tiempo. Dale...¡Ya ! (Titi comienza a pedalear con toda la fuerza que puede) ¡Vamos, pibe, vamos que tenemos que ganar ! ¡Vamos, carajo ! ¡Ese es mi pollo ! (Toma un tachito con agua y se lo arroja en la cara ) ¡Con fuerza que ahora estás mas fresco ! (Canta comouna hinchada) ¡Y dale Titi, dale dale Titi, y dale Titi dale dale Titi ! ¡Tiempo cumplido ! (Mira el cronómetro y el módulo) ¡Bravo ! ¡Bravo! ¡Bajaste dos segundos los cien metros ! (Lo abraza y lo baja de la bici, juntos saltan de alegría, Aguila para de golpe, mira fijo a Titi) TITI : ¿Che, que te pasa que me mirás así ? AGUILA : Nada. No sé...me parece que usted no solo está culón, sino que también tiene más pecho, más caja torácica. ¿Usted no me estará engordando, no ? (Entra Vancini) VANCINI : ¿Qué hacen ustedes abrazados ?. ¡Vamos, a trabajar, que ya es muy tarde ! AGUILA : Ya practicamos. Bajó dos segundos los cien metros. VANCINI : ¡Dejá de abrazar al pibe, y a practicar de nuevo ! TITI : Tengo hambre. AGUILA : Te dije que no podés engordar. TITI : ¡A mi con una buena bici no me para nadie ! VANCINI : ¡Usted, va a tener la mejor bici ! Pero tiene que practicar mucho, prepararse físicamente, y la cabeza también. Tiene que estar concentrado hasta el día de la carrera. (Entra Manguera desde la calle muy entusiasmado) MANGUERA : ¡El 25 es el día ! ¡El 25 se corre ! ¡A practicar pibe, a practicar, que no falta mucho ! (Entra Antonia con el mate y el martillo, se dirige a Vancini, quien tomará el mate y esquivará el martillazo. Detrás entra Beta) BETA : ¡El 25 es el día ! ¡Es el día que voy a parir ! (Se abrazan con Manguera) VANCINI : ¡A practicar ! AGUILA : ¡A practicar ! TITI : ¡Si ! ¡Si! ¡A practicar ! ( Con mucho más ímpetu que antes sube a la bici y pedalea. Euforia general) En escena Manguera y Beta MANGUERA : ¡Qué me parió! ¿Te fijaste, Beta, cómo tengo los tobillos ? ¡Hechos pelota ! (Se cura con agua y sal) ¡Ay, como arde ! BETA : ¿Y vos te quejás ? ¡Si estuvieras embarazado como yo! ¡Entonces sí, entonces sí ! MANGUERA : Entonces si, ¿qué ? BETA : ¡Ay ! ¡No me contradigas, Mangue, que se me contrae, se me cae, ay, se me dilata ! MANGUERA : ¿Llamo al médico ? En seguida lo llamo. (Corre por todo el taller, da vueltas, se acerca a ella y la abraza) Pero no te preocupes, el 25 va a ser la gran carrera, y va a nacer nuestro bebé. BETA : ¡Ay, si, si, que dolor ! (Se contorsiona y levanta la panza) Vancini, desde la mesa de trabajo discursea a Aguila y Titi que juegan toqueteándose disimuladamente, sentados en el modulo VANCINI : Si uno ve tirada una arandela la agarra y la guarda en una cajita, que cuando la necesite la va a encontrar en esa cajita. Hay que se ordenado, prolijo, limpio de cuerpo y alma. Fijarse en uno mismo y mejorar cada día. Ser el mejor. ¡Practicar ! (Deja de trabajar y se acerca al Aguila. Le pega un cachetazo en la cabeza) ¡Y no joder como ustedes ! (También le pega a Titi, este llora) ¡Mírenlo al marica ! ¡Suba a esa bici y practique, que si no nunca va a correr la carrera. Solamente va a correr cuando esté preparado. AGUILA : Para el 25 va a estar tío, se lo juro. VANCINI : ¡No jures en vano ! (Lo amenaza con un cachetazo que el Aguila esquiva) Por eso Dios te hizo rengo. Porque no crees en él. AGUILA : (Aterrorizado) Fue un accidente tío. Usted lo sabe. VANCINI : Yo solo se que usted no pudo correr más en bicicleta, porque no sirve para nada, porque tiene una pata más corta que la otra y nada en la cabeza. AGUILA : ¡Fue por el golpe ! VANCINI : (Lo cachetea en la cabeza) ¡Fue por que Dios lo quiso! (Aguila se abraza y protege con Titi) ¡Y ahora, fuera ! (Titi y Aguila salen corriendo. Antonia que había visto la última parte de la escena se abalanza sobre Vancini y trata de ahorcarlo con las manos, éste la sujeta ; ella entonces se refriega contra su sexo, torpe y desenfrenadamente. El la rechaza suave) VANCINI : ¡Vamos, Antonia ! Que no estamos para eso. Vaya, vaya y prepare algo para comer. (Ella insiste tomándolo por la espalda) ¡Le dije que basta! ¿Qué trata de hacer ? ¿De calentarme ? ¡A mi edad ! ¿Por qué no se deja de joder ? (Zafa de ella y se sienta en la mesa de trabajo) Usted ya me calentó dos veces a mí, y mire el resultado, la Beta y Titi, pero ya no me calienta más, ¿entendió ?. Ya está vieja. Además está chiflada. Linda familia me dio. Y como si fuera poco le tuvimos que criar el hijo a su hermano. Lo crié como si fuera mi hijo. El iba a ser el campeón, pero me falló el Aguila. ¡Volaba, cortaba el aire, y rengo se quedó !. ¡Vergüenza !. Eso, vergüenza me da su familia. (Antonia que se había quedado casi en el medio del taller, corre, toma una maza y trata de golpear en la cabeza a Vancini, quien la esquiva ágilmente) ¿Ve que usted no sirve para nada ?. Ni matarme puede. (La toma del brazo y la lleva para el fondo). Quédese tranquila, y prepare la comida, que eso le sale bien. Están en escena Titi y Beta, está en posición de parir, sentada en una silla, respira profundamente. TITI : ¿Para que respirás así, Beta ? BETA :¿Cómo para qué ?. Por los dolores. Te alivia. ¿No sabés nada de embarazos vos ? TITI : Y yo que voy a saber si nadie me explica. BETA : ¿Te crees que naciste de un repollo ? TITI : No, de la panza de la vieja. BETA : ¡Mirá a la mosquita muerta como sabe! (La increpa) ¿Decime cómo te enteraste ?. Estuviste escuchando conversaciones. ¡Ah, ya sé!. Nos estuvieron espiando al Manguera y a mi. TITI : No, no..., lo sé porque... BETA : Ahora vas a ver con papá, que el se cree que quien sabe quien sos...que te da tantas atenciones porque vos vas a correr en la bici..., y nosotros aquí encerrados, esperando que termines tu preparación. Y mirá vos como le respondés. El se va a enterar de esto..., y para eso te da comida especial, te mima...y vos...mosquita muerta..., espiando todo ! TITI : ¡Yo no espié nada! Yo lo sé porque lo vi en una revista que trajo tu marido. BETA : ¡Claro ! El que te inscribió en la carrera y roba para que vos ganes, para que tengas la mejor bici, y vos lo acusas de pervertidor de menores. TITI : ¿Cómo pervertidor ? BETA : ¡Claro, si dijiste que el te trajo la revista ! (Llora) Y a mi no me trae nada. ¡Y yo voy a tener un hijo ! Y te trae todo a vos, las bicis, las revistas, todo. Y papá también te da todo, y ni se fija en mí, y eso que yo le voy a dar un nieto. Pero dice que son pedos. (Llora desconsoladamente) La escena esta vacía. Se escucha en off la voz de Vancini. VANCINI : ¡Antonia ! ¡Carajo !. ¿Que le pusiste a la sopa ? ¡Veneno de hormigas ! Menos mal que tengo buen olfato. ¡Pero se acabó ! Ahora vas a ver. (Desde la calle entra Manguera, esta vez trae un monopatín en lugar de la acostumbrada bici. Entra despacio, como con miedo de ser visto. Ubica el monopatín en un lugar poco visible. Lo sorprenden los gritos de Vancini) VANCINI : (Todavía en off) ¿Dónde estás que ? ¡Que si agarro...! (Entra en escena...Se detiene al ver a Manguera) ...¿Y usted que hace parado ahí como un marmota ?. ¿No trabaja hoy ? MANGUERA : (Asustado) Ya trabajé, papá. VANCINI : ¡No me diga papá !...que usted no es mi hijo, es el marido de la Beta y nada más. Y si trabajó, ¿dónde está la bici ? MANGUERA : Justamente de eso quería hablarle, Vancini. Resulta que...(No se decide). VANCINI : Vamos, hablá, que no tengo todo el día...¿qué pasó ? MANGUERA : (Con vergüenza) Me...me...la robaron. VANCINI : ¿Cómo que te la robaron ? Si vos no tenés...,me querés decir que te robaron la bici que vos robaste. MANGUERA : Si ...claro...yo no tengo bici mía. VANCINI (No lo puede creer) A ver mirame la cara...¡Vos sos un boludo ! MANGUERA : Si, pero lo cagué a patadas en los tobillos. VANCINI : Vos no servís ni para robar un triciclo. MANGUERA : Pero igual traje algo. No iba a venir con las manos vacías, y después no iba a comer acá sin habérmelo ganado...(Le muestra el monopatín) ¡Mire ! VANCINI : (Sorprendido) Pero...¿qué me trajo ?...¡Un monopatín ! MANGUERA : (Orgulloso) ¡Si ! VANCINI : (Disimulando su disgusto) ¿Pero por qué no me lo dijo antes ? Haber empezado por ahí...¡Un monopatín !. Con lo difícil que es conseguir uno en estos días..., con la cantidad de piezas que me van a servir para la bici. ¡Usted se ganó de sobra la comida !. Vaya a la cocina y sírvase un plato de esa rica sopa que preparó la Antonia. MANGUERA : Gracias, pero no tengo hambre todavía. VANCINI : Pero usted me dijo que quería comer. ¿Entonces ?. Vaya y tome un rico plato de sopa. MANGUERA : Sí, pero más tarde. VANCINI : Usted va a tomar el plato de sopa ahora. ¿Entendido ? MANGUERA : Sí, sí, corriendo lo tomo. (Sale) VANCINI : ¡Un monopatín ! ¡Si será idiota ! (Tira el monopatín con bronca) Antonia y el Aguila. Ella lo cobija en su regazo mientras llora quedamente. Luego entran Beta, Titi y Manguera AGUILA : ¿Vio, tía ? Yo me mato preparando a Titi, y como si nada. Me pega, le pega a Titi, y mire lo que le hizo al Manguera, le hizo tomar un plato de sopa y este casi se muere. Usted también, tía, podría dejarse de joder con querer matarlo. Por eso la ligamos todos. (Antonia lo mira con compasión) Sí, ya sé, tiene razón. Si yo no fuese un estropio también lo intentaría. (Se acurruca contra ella y esta lo hamaca. Beta y Titi entran trayendo a la rastra a Manguera). BETA : Lo único que me faltaba, que el Mangue muera envenenado por culpa de la vieja. TITI : Dejá de hablar pavadas, que Manguera no se va a morir, está indigestado nada más. BETA : No me contradigas, que me ponés nerviosa y se me dilata...¡Ay !. ¡Que no puedo hacer fuerza. (Suelta a Manguera, quien cae al suelo arrastrando a Titi, quien queda aplastado) AGUILA : ¡Tranquilos, che, que van a lastimar a Titi !. Y entonces si que sonamos. MANGUERA : (Con ayuda del Aguila sale de arriba de Titi) Yo no quiero afanar más bicicletas, ni monopatines, ni nada. Me dan lástima los pibes. (Se deja caer en una silla) TITI : (Desde el suelo) ¿Viste, Beta, que habla ?. Que no se va a morir. BETA : La que se va a morir soy yo, si me dan tantos disgustos y no voy a poder ver a mi bebé. MANGUERA : Lo digo en serio, no voy a robar más bicis. Ya tiene bastante el viejo para hacer el prototipo. AGUILA : ¡No lo digas ni jodiendo !. ¿De que vas a vivir, eh ?. Si no sabés hacer nada. BETA : ¿Y qué vamos a comer si vos no trabajás más ? TITI : Y si no comemos yo voy a estar débil, y no me voy a poder preparar para la competencia. MANGUERA : Estoy cansado de que me pateen los tobillos, de ver llorar a los pibes, porque yo voy a tener un hijo, y que van a decir de mi, ¿eh ?. Porque vamos a tener un hijo, ¿no es cierto, Beta ? BETA : (Sorprendida) Sí... MANGUERA : Entonces, ese pibe no puede tener un padre chorro de bicicletas. ¿Cómo el padre de mi hijo va a robarle a otros chicos ?. Robarle la bici a un pibe es robarle la diversión, ya no pueden correr más, es como...como..., contales Aguila lo que te pasó a vos...después..., cuando no pudiste correr más, volabas, cortabas el aire, era...un águila era. VANCINI : (Apareciendo en el fondo) Tenés razón Manguera, tenés razón, el Aguila volaba, tenía alas en lugar de pies, tenés razón, cortaba el aire. TITI Y AGUILA EN PLENA PRACTICA TITI : Por hoy basta, Aguila, ya me cansé. (Intenta bajar del módulo) AGUILA : Usted tiene que seguir practicando, es la única forma de ganar. TITI : Si, pero yo tengo ganas de hacer otras cosas. AGUILA : ¿Y que tiene ganas de hacer el pibe ? TITI : No sé, que se yo. Así que vos volabas, tenías alas en los pies. (Saca un cigarrillo) ¿Tenés fuego ? AGUILA : (Amaga darle una cachetada) ¡Fumando, pero si me da ganas de... ! ¿De dónde sacaste el pucho ese vos ? TITI : Se te cayó a vos. AGUILA : ¡Guarde eso en seguida..., mire si lo ve el viejo ! TITI : Pero vos fumás. AGUILA : Yo si, pero poco. Además se acabó el deporte para mi. Ahora soy entrenador físico. Puedo fumar. TITI : ¿Entonces... me enseñas ?. Una pitadita solamente... (Se acerca mimoseando) ¡Dale, Aguila ! AGUILA : (Incómodo) No señor, no me lo permite el reglamento. TITI : ¡Ufa, Aguila ! ¡Siempre practicando, practicando ! (Le ruega) ¡Dale ! AGUILA : (Lo separa y va a fijarse si viene alguien) Está bien, pero por única vez, y espero que no se envicie. TITI : (Lo abraza y le da un beso) Dame fuego. AGUILA : (Confuso) Creo que ya está grande, que puedo enseñarle algunas cosas. (Saca un fósforo, le quita el cigarrillo y lo prende). ¿Ve cómo se hace ? Se absorbe y después se tira el humo..., pero despacito. (Titi prueba, tose, el Aguila le tapa la boca para que no se escuche, ríen con picardía, cómplices. Luego se pasean imitando personajes serios que fuman. Se divierten. Se abrazan frontalmente, Titi se confunde pero acepta el abrazo) TITI : Aguila, siento que me tiemblan las piernas. AGUILA : Debe ser el cigarrillo, yo siento calor...y cosquillas. (Ambos ríen y se vuelven a abrazar más fuerte). TITI : ¡Aguila ! AGUILA : ¿Qué ? TITI : No quiero entrenar más. Están Beta y Manguera. Luego entrarán Antonia y Vancini BETA : No podés dejar de trabajar más, Mangue. ¿Qué vas a hacer ?. ¿Cómo vamos a mantenernos ? MANGUERA : Ya lo dije, Beta : "No más bicis". ¡Se acabó !. ¡Se a-ca-bó ! ¿Entendiste ? BETA : Pensalo, el viejo te dió una semana de comida gratis para que lo pienses. MANGUERA : Ya lo pensé. ¡No robo más !. Aunque me muera de hambre. BETA : ¿Falta mucho para el 25 ? MANGUERA : ¿Por qué ? BETA : Porque no se si llego con estos disgustos que me das. ¡Ay !. ¡Ay ! (Entra Vancini y abraza a Beta) VANCINI : Pero pobre hijita, como sufre. ¡Todo por este cretino !. ¡Fuera ! ¡Váyase, que yo me encargo de mi hija y de mi nieto ! ¡Inútil ! ¡Desamorado!. Hacer sufrir así a esta criatura. (Entra Antonia con un rollo de papel encendido y trata de quemar a Vancini) VANCINI : ¡Vasta, Antonia, que vas a quemar el taller ! (La empuja. Esta cae sentada en el módulo y queda inmóvil) MANGUERA : ¡Desgraciado ! ¿Ahora abraza a su hija ?. Lo hace para ponerme celoso, nunca la miró y ahora...¿Sabe una cosa...? Nos rajamos..., Beta y yo nos vamos. BETA : No le hagas caso, papá. Está muy nervioso, le duelen los tobillos de las patadas que le dan. VANCINI : ¡Calmate, hijita, calmate, que se te contrae, se te dilata, se te cae ! ¡Calmate ! MANGUERA : (Gritando) ¡No voy a afanar más bicicletas ! VANCINI : Entonces no come más. En escena están todos. Manguera muy demacrado, Beta con los dolores de siempre, Titi y Aguila sentados en el mismo banco hombro con hombro y Antonia parada con el mate en una mano y la pava en la otra. Pasaron varios días desde la ultima escena. Vancini trabaja en su mesa. MANGUERA : Tengo hambre...quiero comer. Vancini hijo de... VANCINI : Antonia, cebale un mate al Mangue, que tiene languidez. (Antonia se acerca por detrás de Vancini, ceba el mate sobre su cabeza y lo hace desbordar quemando a este). VANCINI : ¡Pero, vieja de porquería ! A un asilo te tendría que mandar. (Aguila y Titi ríen y cuchichean por lo bajo) ¿Y ustedes de que se ríen ?. Manga de putos. (Ordena) ¡A la bici a practicar, que vamos a conseguir más piezas para el prototipo!. ¡Vamos, rápido !. (Titi sube rápidamente, el Aguila toma el cronómetro y da la orden de largada). AGUILA : Preparado, listo...¡ya ! (Titi comienza a pedalear con toda su fuerzas) ¡Vamos que llega el 25, vamos Titi, vamos que ganamos ! VANCINI : (También alentando) ¡Adelante, Titi, corte el aire, levante vuelo, sea el mejor ! BETA : (Ayudando) ¡Vamos que se me contrae! (Levanta la panza. Antonia salta y baila revoleando una llave cruz. Titi en un último esfuerzo cae desvanecida antes de que el Águila cante tiempo cumplido. Horror general). VANCINI : ¿Qué le hicieron al pibe ? (Lo saca del módulo y lo sienta en una silla, busca un diario y lo apantalla) Vos Aguila, ¿qué le diste ?. Estaba fuerte, ágil. (Le da con el diario al Aguila) ¿Qué le hicieron ? AGUILA : (Cubriéndose los golpes) Nada, tío, lo que pasa es que Titi está creciendo ...y eso debilita...usted sabe. VANCINI : ¡Yo no sé nada ! AGUILA : Está más culón...tiene más pecho...está...digamos...agrandándose. VANCINI : ¡Ah, ya sé !. Usted lo anduvo toqueteando. ¿Cómo no me di cuenta ? Si últimamente parecían dos putos de juntitos que estaban. Eso me lo mareó. (Enojadísimo) ¡Tiene que practicar ! Usted es un degenerado que me lo distrae con las caricias y arrumacos. ¡Usted es un bufarrón !. (Antonia intenta pegarle con la llave, este la esquiva y sin querer, quedan abrazados, entonces Antonia comienza a refregarse contra Vancini) VANCINI : ¡Quédese quieta !. Familia de degenerados, eso es lo que tengo. Yo que siempre me esforcé por ustedes, que les di de comer, que les di trabajo, profesión. A ver vos, Aguila, eras un huerfanito y yo te hice corredor, después entrenador físico, y así me pagaste. ¿Vos, Manguera ?. A vos te entregué a mi primer hija, y te di un trabajo digno: "Seleccionador de re-puestos de mi bicicletería". ¿Y a Titi ?. Quise que fuera el mejor ciclista, el más preparado, el de la mejor bici, ¿y qué pasa ?. Nada. Todos en contra mío. TITI : No... quiero... practi...(El Aguila le tapa la boca) MANGUERA : Vancini, ladrón de... (Cae al suelo) BETA : Y a mi viejo, ¿qué me diste ? VANCINI : Vas a tener un hijo que va a ser mi nieto. Eso te di. MANGUERA : (Desde el suelo) ¡Viejo de mierda ! En escena Beta y Manguera BETA : No te vayas, Mangue, no me dejes. MANGUERA : (Está muy débil. Se lleva en un bolso de mano todas sus pertenencias) Dejáme, Beta, o mejor, venite conmigo y vamos a caminar, a tomar sol, y si llueve nos mojamos y listo. BETA : No jodas, Mangue, dejá el bolso y quedate, ¿cómo me vas a dejar sola ?...¿y el bebé, Mangue ?. MANGUERA : Vení conmigo. Que el bebé nazca en la calle. Afuera está lleno de chicos y de gente. BETA : Los chicos te rompieron todos los tobillos. MANGUERA : ¡Puta madre, Beta ! ¿No entendés ? BETA : ¿Qué querés que entienda con esta panza que tengo, con los dolores...(Llora) ¡Que se me dilata !. MANGUERA : ¡Tu viejo me echó !. Eso tenés que entender. Y no me voy a quedar en esta casa BETA : ¡Yo te quiero, Mangue !. MANGUERA : Si, pero la casa no es tuya. BETA : ¡Yo vivo acá ! (Llora más fuerte) No me abandones que se me contrae (Lo abraza desesperadamente) Yo no quiero irme, Mangue, no quiero. (Le patea fuerte los tobillos, Manguera cae loco de dolor). Solo Aguila en escena. Luego entra Titi. AGUILA : (Está sentado en el módulo. Pedalea despacio. La pierna más corta le hace largar un pedal en cada vuelta, trata de acomodarse para llegar a los dos, friccionándose, así, en el asiento) ¡Tengo que poder !. ¡Tengo que poder !. ¡Carajo !. Me voy a paspar todo, pero me voy a acostumbrar. Si nadie corre no hay 25, y yo todavía puedo. ¡Hay que practicar !. (Pedalea más fuerte) ¡Eso !. ¡Así ! . ¡Vamos Aguila, tenés que cortar el aire, como el Pampero tenés que ser ! (Entra Titi, lleva puesto un vaquero y una remera que le marcan el cuerpo Se queda mirando al Aguila desde lejos, luego se acerca y se para frente a este, que actúa como si estuviera solo). AGUILA : ¡Vamos Aguila todavía !. ¡Vamos que usted puede ! (Titi lo mira insistente) No me mire con esa cara. ¿Que se piensa que es ? ¿Eh ?...¿Quehace con esa ropa ? (Pausa) Ahora yo tengo que practicar por usted. ¿No le da vergüenza dejar su carrera deportiva, con lo bien que andaba ? (Deja de pedalear) Prometía ser el mejor. Tiene un preparador que se dedica solo a usted y se hace la mariquita. ¡Se desmaya y todo !. No quiero...prac...Menos mal que le tapé la boca, si no. (Baja del módulo y se le acerca). Vamos póngase otra ropa. La ropa de ciclista, ¿qué quiere hacer vestido así ? (Cariñoso) Vamos pibe, que llega el 25. (Le pega trompaditas en el mentón, juegan como muchachitos, y de a poco terminan en una lucha cuerpo a cuerpo) TITI : (En pleno juego y a los gritos) ¡Aguila, no voy a practicar más ! ¡Me cansé ! AGUILA : (Separándose) ¡No digas más eso, ni en broma! Un pibe con sus condiciones... TITI : ¡Dejame de decir pibe! AGUILA : ¿Y cómo quiere que le diga, a ver ?. (Burlándose) ¿Quiere que le diga princesa, reina ? Vamos princesa, vamos que ganamos mi reina. La carrera es de varones, de pibes. ¿O va a correr con las mujercitas ? TITI : No voy a correr. AGUILA : (Se sienta en el módulo con vergüenza) Ya sé, princesa, ya sé, no me lo diga más. Entran al taller Vancini y Antonia. Luego Beta. Más tarde el Aguila, Manguera y Titi VANCINI : (Entra llevando un cuadro de bicicleta, Antonia lo sigue y se para frente a él con la pava y el mate en suspenso, inmóvil) ¡Antonia !. Correte que me hacés sombra y no veo lo que hago. (Antonia sigue inmóvil) ¿No escuchás lo que te digo? (La mira enojado) ¡Antonia ! (Se acerca a ella y la zamarrea) ¡Correte, carajo! (La aparta. Antonia le tira con la pava y el mate, pegándole y enchastrándolo todo) ¡Mire como me puso !. ¡Usted está loca ! (Antonia se cruza de brazos y le da la espalda) ¿Y ahora que te pasa ? ¿Te enojaste ? ¿Vos te enojaste ? Para que usted sepa el enojado soy yo, que todos me abandonaron. El Manguera se fue, no roba más Titi no quiere ni practicar, ¡no quiero ser deportista !, dice. El Aguila que se enamora de Titi. ¿Qué clase de entrenador es, eh ?. Y ahora usted que me tira con el mate. (Con aparente ternura) Andá, calentá la pava y cebame de nuevo. (Le toca la cola) ¡Dale Antonia ! (Antonia se da vuelta, lo mira, le toma la cabeza y le muerde la nariz con toda su fuerza) ¡Ay ! ¡Desgraciada, mi nariz ! ¡Ay ! (Antonia sale por el fondo) ¡Ay, todos en mi contra ! ¡Mi nariz ! ¡Ay ! (Grita) Usted está loca. ¡Toda mi vida trabajando para ustedes, les di todas las oportunidades, y ahora me dejan solo ! BETA : (Apareciendo por un lateral. Con tranquilidad) No, papá, no diga eso, que me tiene a mi. VANCINI : (Sorprendido) ¿Eh ?...¿A usted ?. BETA : Sí, a mí. VANCINI : ¿Y a usted para qué la quiero ? Si está gorda y llena de dolores. BETA : Pero lo tengo al Manguera. VANCINI : El Manguera se fue, y difícil que vuelva. BETA : ¿Qué está diciendo, papá ? Está en mi pieza. Un poco lastimado en los tobillos, pero sano y fuerte como para seguir siendo especialista en repuestos. VANCINI : ¿De veras me lo dice? BETA : Yo no le miento... ¿O acaso le mentí alguna vez ? (Se acerca y lo abraza) Yo siempre quise que usted gane esa carrera. VANCINI : Salga de encima mío. (La empuja) BETA : No me empuje papá, que estoy embarazada. VANCINI : Yo quiero a alguien que se suba arriba de la bici y corra, ya no me hace falta el Manguera, ni vos, ni nadie. (Grita) ¡Quiero que Titi se suba arriba de la bici ! (Aparece el Aguila corriendo, se sube al módulo y comienza a pedalear) AGUILA : No se preocupe, tío, que yo voy a ganar. (Vancini se le acerca y le pega un cachetazo en la cabeza, éste cae y rueda por el piso) AGUILA : (Desde el suelo) Deme una oportunidad, tío. Le prometo que lo voy a hacer quedar bien. ¡Le juro ! VANCINI : ¡Vos ya no servís para nada ! Ni como entrenador servís. Sino, fijate lo que hiciste con Titi, que ya no quiere correr. AGUILA : La Titi ya es una mujer, tío, dese cuenta, tiene...(Hace señas con las manos) VANCINI : ¡Callate, asqueroso ! (Amenaza con pegarle, cuando entra corriendo Antonia y se interpone entre los dos. Este detiene el movimiento) ¿Y ahora qué pasa ? ¿Defensora de inválidos te volviste ? (Ella lo amenaza poniéndose en guardia como un boxeador, él retrocede, tropieza y cae. Beta se adelanta a socorrerlo) BETA : ¡Está muerto, muerto !...¡Ay ! ¡Se me contrae, se me cae, atájemelo, mamá ! (Se sienta sobre la panza de Vancini con las piernas abiertas. Antonia y el Aguila se acercan para ayudarla. Atraído por los gritos aparece, casi arrastrándose, Manguera, quien la toma por los brazos desde atrás, inmovilizándola. En el fondo, vestida por primera vez de mujer la Titi mira la escena del supuesto parto). Están Manguera y Beta MANGUERA : (Tratando de subir la escalera para salir, insiste y vuelve a caer) Beta, ayudame, se me doblan las piernas y no puedo subir. BETA : (Aún con la panza, sentada en el banco de trabajo) No me jodas, Mangue (Revisa unas piezas) ¿Esto es lo mejor que trajiste ? MANGUERA : ¿Todavía te quejás ? ¿Y ahora que importa ? Ya todo se terminó. Ayudame. BETA : Te dije que no jodas. ¿Cómo se arman estos aparatos ? MANGUERA : ¿Qué te importa ? Ayudame a salir. BETA : Seguro que no sabés. Tanto afanar que te olvidaste de como era un triciclo. Y seguro que ni de andar en bici te acordás. MANGUERA : ¡Avisá ! ¿Cómo te creés que llego hasta acá ? ¿Con la bici al hombro ? ¡Avisá ! BETA : ¿A ver ? Subite al módulo, a ver si sabés... MANGUERA : ¡No rompas, Beta!. Y ayudame a salir, que me quiero ir de acá. BETA : ¿Y tu hijo, eh ?. ¿Tu hijo ?. El sería un buen deportista, él sería el orgullo del abuelo. Pero a vos no te importa, solo querés irte, abandonarlo todo y dejarme a mi y a la criatura solos, con una vieja loca, con un primo rengo, y una hermana que...que bueno...que se yo...y mi viejo...que ...pobrecito. (Llora) Solo a vos se te ocurre irte y dejarlo todo. ¡Y a mí embarazada ! (Llora desconsolada) MANGUERA : (Usando las manos para trepar la escalera) No me vas a convencer, Beta, por más que llores. Quiero tomar aire, irme lejos de este sótano. BETA : Está bien, andate si querés, pero no vuelvas. No vas a conocer a tu hijo. Tu hijo, ¿cómo va a llamarse, eh ? MANGUERA : (Sigue tratando de trepar) No me vas a joder, Beta, no me vas a joder. Están en escena Beta, Manguera, Aguila y Antonia. Beta sigue sentada en la mesa de trabajo armando un aparato. Manguera con los pies en una palangana con agua y sal, frente al módulo que mira fijamente, Aguila cerca de este y Antonia observa desde el fondo. AGUILA : ¡Dale Manguera, animate, que yo te tomo el tiempo, vas a ver que podés. (Manguera, con mucha dificultad, saca los pies de la palangana e intenta subir al módulo con ayuda del Aguila). BETA : ¡Vamos, Mangue, vamos que usted puede ! AGUILA : ¡Vamos, ánimo Manguera ! (En un último esfuerzo Manguera sube al módulo) AGUILA y BETA ¡Vamos, Manguera, métale pata ! ¡Pedalee ! ¡Vuele, corte el aire ! MANGUERA : Me duelen los pies, no puedo. BETA : No seas maricón, hombre, que no se diga, que hay que competir. AGUILA : ¡Vamos, que acá está el mejor entrenador del mundo ! (Manguera se entusiasma y comienza a pedalear cada vez más rápido. Por el fondo aparecen Titi y Antonia, que abrazadas miran juntas la escena) AGUILA : (Tirándole agua con un jarrito) ¡Vamos Mangue, todavía ! ¡Vamos que ganamos ! BETA : ¡Ahora sí el viejo va a tener un buen corredor ! (Beta y Aguila reproducen las clásicas hinchadas) Aguila y Titi sentados en el módulo AGUILA : (Sorprendido al ver que Titi tiene puesto un vestido rojo y lleva un bolso de mano) ¡Así que se va nomás! Nos deja. TITI : Sí, me voy Aguila. AGUILA : ¿Y no le da pena dejar el deporte ? (Titi lo mira y no contesta, el Aguila baja la cabeza, Titi lo abraza cariñosamente, el Aguila comienza con un llanto lento y de profundo dolor) TITI : ¡Llorá, Aguila, llorá ! AGUILA : Yo no estoy llorando, es que estoy resfriado y... TITI : Sí, sí. AGUILA : Es que usted corría tan bien, y parecía...que digo un águila, un cóndor parecía, eso, un cóndor, y ahora se la ve tan distinta, tan...(Titi lo toma de las manos) Tan...(Ella lo abraza. El, azorado con los brazos a los costados del cuerpo) Tan...linda se la ve. Usted se...agrandó, se... creció...¡eso !. ¡Se creció!...se hizo una...(No le salen las palabras) TITI : Aguila. ¡Chau ! AGUILA : ¡Chau, Titi, chau ! Respirá hondo afuera, que te podés marear. (Titi va subiendo lentamente la escalera) Volvé si te sentís mal. (Titi se detiene y se da vuelta. Mira al Aguila con infinita ternura) Del viejo no te preocupes, entre todos lo vamos a cuidar. (Ella baja unos escalones) ¿Te quedás ? (Lo besa en la mejilla largamente) Lo vamos a cuidar. Ya no jode. ¿Te quedás ? TITI : Aguila, ¿querés que te tome el tiempo ? AGUILA : ¿Qué decís ? TITI : Lo que escuchaste. ¡Dale ! AGUILA : ¿Estás loca, vos ? TITI : ¡Dale, Aguila ! AGUILA : Titi, estás tan linda. TITI : ¡Dale, subí al módulo y pedalea ! ¡Vamos Aguila, a volar ! (Aguila se sienta en el módulo impulsado por Titi) ¡Vamos Aguila, a pedalear ! (Aguila está inmóvil mirándola) AGUILA : ¡Estás tan linda! TITI : ¡A pedalear que tenés que ganar ! AGUILA : (Sin moverse) Con el pelo así... TITI : Se acerca el 25, Aguila se acerca... AGUILA : ¡No me jodas más, Titi ! (Titi corta la euforia y lentamente se aleja caminando para atrás hasta la escalera, se da vuelta y sube lentamente desapareciendo. Aguila ha quedado sobre el módulo, mirándola con lágrimas en los ojos) ¡Titi ! (Grita) ¡Titi ! ¡El tiempo no me tomaste el tiempo ! (Corre hasta la escalera) ¡Tomame el tiempo, pibe...! (Se sienta vencido en uno de los escalones...) En off las voces de Beta y de Manguera. Luego todos en escena. BETA : ¡Vamos, viejo, un poco de ánimo ! ¡Sonría por lo menos ! MANGUERA : Dejalo, ya se va a acostumbrar. (Entran empujando ambos, una especie de silla de ruedas. Está fabricada con distintos repuestos, logrando así un cuatriciclo en cuyo centro tiene un asiento de bicicleta y unos inútiles pedales. A modo de respaldo, un cuadro de bicicleta soldado a una estructura que sostiene al aparato. Vancini viene sentado en el con las piernas colgando y amarrado al respaldo por los brazos, que le fueron atados a este para mantenerlo rígido, y para que no se caiga, dando la imagen de un ridículo Cristo. Lo único que Vancini puede mover es la cabeza y los ojos. Detrás de estos tres, viene Antonia con la pava y el mate). BETA : ¡Claro, vos decís eso por que no es tu papá ! (A Vancini) No se preocupe, papá, que todo va a salir bien. ¿Vio que lindo carrito le hizo su hijita ?. Ahora va a poder ver como el Manguera practica para la carrera del 25. ¿No Mangue ? MANGUERA : Yo no sé para que carajo le hablás, si ni escucharte debe. BETA : ¡Claro que me escucha ! A ver viejo, diga que si. (Vancini la mira de reojo, después mira a Manguera que se asusta). MANGUERA : ¡Me miró ! BETA : ¿Viste? MANGUERA : Me puteó con la mirada. BETA : ¡Mi viejo no dice malas palabras ! (Se acerca al padre y le acaricia la cara) ¿Estás cómodo, papá ? (Vancini la mira con furia) ¿Viste ? Está cómodo. (Lo lleva a la mesa de trabajo) De acá puede ver bien todos los movimientos. (Vancini recorre todo el lugar con la mirada, primero a Manguera que saca de su bolsillo trasero una gorrita de ciclista, se la pone y sube al módulo. Luego a Beta, que se sienta en la silla donde acostumbra darle contracciones. Después se detiene en el Aguila que está con la cabeza entre las piernas, de a poco sin atreverse a mirar a Vancini se acerca a Manguera, saca un cronómetro y se prepara para tomarle el tiempo. También mira a Antonia que sigue parada con el mate y la pava) BETA : Vamos vieja, cébele unos mates al pobre de papá. (Antonia se acerca a Vancini lentamente) AGUILA : ¡Preparado ! MANGUERA : Todavía me duelen los tobillos. BETA : ¿Que le pasa, mamá, no escuchó lo que le dije ? (Vancini mira a Antonia con desconfianza) AGUILA : ¡Listo! MANGUERA : No se si voy a poder dar un buen tiempo. (Antonia deja la pava y el mate sobre la mesa) BETA : No haga locuras vieja, que se me contrae, se me dilata. ¡Ay, se me cae ! AGUILA : ¡Ya ! (Manguera comienza a pedalear lo mejor que puede, Beta grita por las contracciones, el Aguila hace de hinchada y le tira agua en la cara a Manguera. Mientras ante la mirada de terror de Vancini, Antonia toma un inflador, le tapa la nariz y cuando este abre la boca se lo introduce. Comienza a inflar, despacio al principio, imprimiendo de a poco más velocidad hasta tomar el ritmo de pedaleo de Manguera y los gritos eufóricos de Aguila) AGUILA : ¡Tiempo ! (Todo se detiene) TELON Fin de Familia de Vancini y Antonia su mujer, de Omar Aita. Toda utilización total o parcial de la obra deberá contar con la autorización del autor.
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